El ataque de Hamás a Israel que desencadenó una respuesta militar israelí, ha dejado un saldo devastador que aún continúa en desarrollo. La guerra se ha expandido, afectando no solo a los territorios directamente involucrados sino también a países vecinos como Líbano, Irán, Siria y Yemén.

El impacto en la población civil ha sido particularmente grave. Según informes, una persona muere cada 12 minutos en Gaza desde el inicio del conflicto, y un niño muere cada 46 minutos. Estas cifras ponen de manifiesto la brutalidad del enfrentamiento y la urgente necesidad de abordar la crisis humanitaria que se ha intensificado en la Franja de Gaza. 

La estrategia de Hamás de camuflarse entre la población civil y la respuesta de Israel, que no ha diferenciado entre combatientes y no combatientes, ha llevado a un alto número de víctimas civiles.

A nivel internacional, el conflicto ha generado una alarma considerable dominando casi en su totalidad la agenda global como el principal conflicto bélico en desarrollo, con temores de que la situación pueda escalar a un conflicto más amplio en Oriente Medio. La comunidad internacional ha hecho llamados a un alto al fuego y a la reanudación de las negociaciones de paz, pero hasta ahora, estos esfuerzos no han dado frutos tangibles.

¿Por qué las iniciativas de diálogo han fracasado ante esta nueva escalada del conflicto? Las tensiones históricas entre Israel y los palestinos por la disputa territorial y los desacuerdos sobre el reconocimiento mutuo han creado un entorno donde la desconfianza prevalece. 

Además, la división política entre las facciones palestinas, con Hamás controlando Gaza y la Autoridad Palestina gobernando partes de Cisjordania, complica aún más los esfuerzos de diálogo. Asimismo, los intereses de otros países y actores regionales también juegan un papel significativo. 

En este orden, las posiciones no negociables entre Israel y Hamás se han visto obstaculizadas por la falta de un terreno común al no ser inaceptables para la otra parte. Por ejemplo, Hamás ha exigido el levantamiento del bloqueo israelí sobre Gaza, mientras que Israel insiste en la desmilitarización de Hamás como condición para cualquier acuerdo. Estas posiciones fijas dificultan encontrar un punto medio.

Ante esto, la memoria de las víctimas y la compleja situación de los sobrevivientes deben ser un llamado a la acción para todos aquellos preocupados por la paz en Oriente Medio. Solo a través de un diálogo inclusivo y soluciones basadas en el respeto mutuo y el derecho internacional, se podrá esperar un futuro más pacífico para la región.

Ahora bien, ¿Cuál ha sido la posición oficial de Venezuela ante el conflicto? Desde sus inicios, el chavismo ha expresado abiertamente su apoyo a la causa palestina, posicionándose en contra de lo que considera políticas imperialistas y de ocupación por parte de Israel. El gobierno de Chávez fue uno de los primeros en América Latina en reconocer al Estado palestino en 2009, y bajo su mandato, Venezuela estableció relaciones diplomáticas plenas con Palestina.

El apoyo se ha extendido también a la cooperación bilateral. Venezuela ha enviado ayuda humanitaria a Palestina y ha ofrecido becas para que estudiantes palestinos estudien en universidades venezolanas. Además, en varias ocasiones, líderes chavistas han participado en actos simbólicos y han hecho llamados a la solidaridad internacional con el pueblo palestino.

Por los recientes acontecimientos en relación a la reciente escalada, el chavismo ha reiterado su solidaridad con Palestina. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, reiteró contundentemente el 05 de abril su solidaridad con Palestina, de la que dijo que sufre un «genocidio» por parte de Israel, en un mensaje a propósito del Día de Al Quds (Jerusalén), que se conmemora el último viernes del mes sagrado musulmán de Ramadán. «Lo que el régimen de Tel Aviv hace contra el pueblo palestino es un genocidio y no podemos ser indiferentes», escribió en X el líder chavista, quien reafirmó su apoyo a la libertad de Palestina. 

Asimismo, el jefe de Estado, en nombre de Venezuela, condenó y repudió la «cínica y flagrante violación del derecho internacional por parte de Israel, la misma que ha cobrado miles de vidas inocentes, dejando solo devastación y sufrimiento». Asimismo, el domingo 5 de mayo de este año, Maduro apoyó las protestas a favor de Palestina de los estudiantes de varias universidades de Estados Unidos, que han protestado contra de la ofensiva de Israel en la Franja de Gaza, donde han muerto más de 34.600 personas desde el pasado 7 de octubre de 2023. “Sigan adelante jóvenes, la voz de ustedes es nuestra voz y nos sentimos representados. Sigan adelante, a defender el derecho a la vida”. 

El pasado 8 de octubre, el mandatario nacional rafirmó su apoyo a Palestina y Líbano: “Defender a Palestina y su derecho a la vida, a su independencia, a la existencia, es proteger el derecho a la existencia de Venezuela, de América Latina, del Caribe. Es una batalla crucial entre el fascismo, el colonialismo, el sionismo y el derecho a la independencia y la diversidad cultural (…) Beirut y todo el Líbano va a renacer como el ave fénix, nunca va a estar de rodillas». Además, celebró la posición de diálogo, paz y respeto entre naciones que Venezuela ha mantenido frente a las guerras en Oriente Medio y el mundo”.

En un reciente acto en Caracas, Diosdado Cabello declaró la "solidaridad absoluta" con Palestina, condenando lo que describió como acciones genocidas por parte de Israel. Por su parte, Tarek William Saab ha acusado a Israel de agredir no solo a Palestina sino también a otros países de la región, y ha llamado a la comunidad internacional a rechazar estas acciones. Estas declaraciones reflejan la postura del chavismo de alinearse con los países y movimientos que, según su perspectiva, luchan contra el imperialismo y buscan la autodeterminación que serían aquellos no alineados a EE.UU. e Israel.